La teoría feminista aplicada al ámbito de la salud de las mujeresdiscursos y prácticas (España, 1975-2013)
- Nogueiras García, Belén
- Luisa Posada Kubissa Director/a
Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid
Fecha de defensa: 06 de abril de 2018
- Carmen Mejía Ruiz Presidente/a
- María Bustelo Ruesta Secretario/a
- Dau García Dauder Vocal
- Eulalia Pérez Sedeño Vocal
- Soledad Murillo de la Vega Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
En esta investigación se fundamenta la tesis de que los discursos y vindicaciones relacionados con la salud de las mujeres están presentes en cada etapa histórica del desarrollo del feminismo, siguiendo las mismas líneas discursivas y vindicativas que caracterizan cada periodo. Los discursos feministas que relacionan el malestar y la enfermedad de las mujeres con la desigualdad y la subordinación se iniciaron ya en la Ilustración. La obra de Mary Wollstonecraft, Vindicación de los Derechos de la Mujer, considerada un texto fundacional que puso las bases intelectuales y políticas del feminismo, también puede y debe ser considerada un texto fundacional en la teoría feminista aplicada al ámbito de la salud. Durante el sufragismo, etapa en la que además del derecho al voto se vindica el acceso de las mujeres a la educación y al ejercicio de todas las profesiones, se producen intensas luchas teóricas y políticas para la incorporación de las mujeres a los estudios universitarios en las disciplinas sanitarias, especialmente en la medicina, así como para su posterior desempeño profesional. En España, a finales del siglo XIX, las primeras mujeres que acceden a la Universidad y se doctoran son médicas y sus tesis doctorales se dedican a desactivar los argumentos médicos en contra del acceso de las mujeres a la educación. Asimismo, las mujeres que protagonizaron las vindicaciones feministas en esta etapa, como Emilia Pardo Bazán y Concepción Arenal, combatieron duramente los argumentos para la exclusión de las mujeres de la medicina y, al igual que Mary Wollstonecraft, Concepción Arenal identificó el malestar que sienten las mujeres como una consecuencia de su reclusión en la vida doméstica y de las restricciones impuestas a su desarrollo intelectual y profesional, como después teorizará Betty Friedan en La Mística de la Feminidad. También en la obra de Simone de Beauvoir, desarrollada entre el sufragismo y el feminismo radical, se encuentran discursos relacionando las condiciones sociales, la doble jornada y el ciclo vital de las mujeres con su estado de salud. En el marco del feminismo radical, los aspectos relacionados con la salud fueron centrales en la teoría, las vindicaciones y acciones feministas. Desde mediados de los años setenta del siglo XX, el ámbito de la salud se ha constituido en objeto de reivindicaciones y luchas activistas, de teorización e investigación, de aplicación de políticas públicas y creación de metodologías para la atención y recuperación de la salud de las mujeres. El ingente desarrollo de los estudios crítico-feministas en estos cuarenta años, formulados en numerosísimas publicaciones y desde muy diferentes disciplinas, dificulta alcanzar una perspectiva global de la trayectoria desarrollada por el feminismo en el campo de la salud. Para facilitar su conocimiento, en este trabajo se recoge el desarrollo de los discursos y prácticas feministas en salud en España desde 1975, teniendo en cuenta los diferentes ámbitos de actuación: activista, profesional, académico, de investigación y político. Se concluye que, en el feminismo, la salud adquiere una dimensión profundamente política, al estar determinada por las condiciones estructurales, materiales y simbólicas, impuestas por el patriarcado en la vida de las mujeres. La idea de que existe una clara y estrecha relación entre el malestar y la enfermedad de las mujeres y las limitaciones que las estructuras patriarcales imponen en sus vidas, forma parte de las raíces mismas de la teoría feminista. La salud es una dimensión fundamental de la vida y el feminismo, desde sus orígenes, desvela que se ve profundamente afectada por el sistema de dominación de los hombres sobre las mujeres. El concepto de salud feminista es biopsicosociopolítico y el feminismo muestra que la política sanitaria del patriarcado es una de las herramientas fundamentales para el control y la subordinación de las mujeres.