Ficotoxinas marinasestudios histopatológicos

Abstract

·Antecedentes: La existencia de las algas planctónicas es vital para un número muy elevado de organismos filtradores (mejillones, ostras, almejas), así como para muchos crustáceos y peces, para los cuales estos microorganismos constituyen la principal fuente de alimentos. Estos microorganismos a veces crecen en gran número, produciendo los llamados ¿blooms¿, mareas rojas o HABs (por sus siglas en inglés: Harmful Algal Blooms). La causa de este incremento es aún hoy en día desconocida, pero pueden influir factores como la temperatura o la disponibilidad de nutrientes. Algunas de las especies de microalgas son capaces de producir potentes toxinas (denominadas ficotoxinas), que en grandes concentraciones pueden producir la muerte masiva de animales. La bioacumulación a través de la cadena trófica constituye el principal peligro para el ser humano, de manera que grandes concentraciones de toxinas sean capaces de llegar al organismo a través del consumo de estos organismos filtradores. Debido a existencia de un gran número de microalgas diferentes, las distintas ficotoxinas poseen diferentes maneras de actuar, pudiendo ocasionar síntomas neurológicos, gastrointestinales, respiratorios, etc. El conocimiento de los diferentes mecanismos de acción y la toxicidad propia de cada toxina pose una gran importancia para poder disminuir los riesgos para la salud humana. De hecho, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria recomendó en su grupo de trabajo de toxinas marinas, que se ampliase la comprensión de la toxicología de todos los grupos de toxinas. ·Objetivos: Determinación de la toxicidad y los mecanismos de acción de diferentes ficotoxinas marinas, especialmente en lo relativo a la neurotoxicidad, toxicidad de órganos, y a la distribución de las toxinas lipofílicas y neurotóxicas. ·Metodología: Se administrarán distintas dosis de una serie de ficotoxinas marinas a animales de experimentación (ratas y ratones), estudiándose sus efectos a nivel molecular (realizando estudios da expresión de proteínas), así como estudios histopatológicos e inmunohistoquímicos de los posibles tejidos afectados. Se emplearán fundamentalmente las toxinas representativas de cada grupo, en especial el ácido okadaico como representante del grupo lipofílico, el ácido domoico como neurotoxina, el azaspirácido, y la yessotoxina.