La última claridadel pensamiento literario de Guillermo Sucre
- Antzus Ramos, Ioannis
- Carmen Ruiz Barrionuevo Director
Universidade de defensa: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 14 de marzo de 2014
- Trinidad Barrera López Presidente/a
- Evarista Guerrero Guerrero Secretaria
- Efthimía Pandís Pavlakis Vogal
- Javier Sánchez Zapatero Vogal
- María del Rocío Oviedo Pérez de Tudela Vogal
Tipo: Tese
Resumo
[ES] En la tesis doctoral La última claridad. El pensamiento literario de Guillermo Sucre he sistematizado el pensamiento del crítico literario venezolano Guillermo Sucre (1933) atendiendo a sus implicaciones políticas y culturales, y al proceso de formación de sus ideas. Para ello he distinguido dos etapas en su obra. La primera abarca los escritos del autor entre 1958 y 1968. En esta década nuestro autor dirige u ocupa un lugar destacado en diversas empresas editoriales venezolanas (Sardio, ¿Letras y Artes¿, Zona Franca e Imagen) y trata de definir el rumbo que debe seguir la literatura nacional. Por eso, por una parte, he atendido a la labor cultural de Sucre durante esta época y, por la otra, he analizado su pensamiento literario que ¿marcado por Mariano Picón Salas y por los poetas simbolistas franceses- trataba de que las obras literarias respondieran a una verdadera necesidad interior de los creadores y templaran la pasión y el instinto con la inteligencia y la lucidez. Después del verano de 1968, nuestro autor marcha a los EEUU. El nuevo contexto en que se ubica impone cambios decisivos en su obra posterior, ya que le permite liberarse del compromiso adoptado hasta entonces con la cultura venezolana y centrarse con mayor libertad en el estudio de la poesía continental. El pensamiento literario de Sucre en este periodo se funda en lo que él llama la ¿conciencia del lenguaje¿. Este concepto significa que la obra literaria no es una mera copia de una realidad preexistente, sino que es en ella donde la propia realidad se inventa. Esta invención que tiene lugar en la obra literaria no es arbitraria sino que permite revelar la realidad como esta verdaderamente es. Al basarse en esta noción, nuestro crítico se opone radicalmente a ¿la teoría de la originalidad americana¿, que planteaba que la literatura hispanoamericana, para ser genuina, tenía simplemente que expresar la originalidad telúrica o social del continente. A lo largo del trabajo he atendido, además, a las implicaciones políticas del pensamiento literario de Guillermo Sucre, para lo que me he basado en la teoría de Jacques Ranciére. En lo que concierne a la política de la estética, el pensamiento de Sucre es coherente, pues él siempre propone que las obras literarias deben ser modelos de saturación expresiva en que el sujeto y el objeto, la pasión y la inteligencia y, en última instancia, la palabra y la referencia establezcan una continuidad sin suplemento de ningún tipo. Este ideal de orden estético implica un determinado orden político que Sucre quiere para Hispanoamérica. De este modo, a través de sus ensayos críticos, lo que el autor propone es un modelo para la ordenación estética, pero también política, del continente.