Chile ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidasacción diplomática y opinión pública 1952-2004

Resumen

A partir del fin de la Segunda Guerra Mundial, la sociedad internacional se organizó en función de dos bloques claramente antagónicos. Bajo esta perspectiva bipolar, el nuevo orden internacional de posguerra se caracterizó por la creación de alianzas que dieran profundidad y consistencia a las amenazas presentes. En este contexto nace la Organización de Naciones Unidas, una institución a la cual Chile fue invitado a participar desde sus inicios. En este contexto, relevancia especial tuvo para el país integrase al Consejo de Seguridad, ya que veían que esta instancia era fundamental para que América Latina estuviese representada en el escenario internacional. Fue entonces en este nuevo ámbito de la esfera internacional, que Chile a pesar de su lejanía geográfica de los grandes centros de actuación y decisión, participó activamente como Miembro no Permanente del Consejo de Seguridad, desarrollando una gestión diplomática activa en cada ocasión que ocupó un escaño en dicho organismo. Así entonces el Estado chileno respondiendo a su interés de orientar su política exterior al establecimiento de una imagen país, con un sello marcadamente democrático y apegado al derecho internacional, respondió en los cutaros bienios que se integró a este Consejo, 1952-1953; 1961-1962; 1996-1997; 2003-2004, con autonomía y con el desafío de no sólo integrarse al sistena internacional, sino que generar las confianzas suficientes para ser visto ccomo un país estable en lo político y confiable como nación libre de compromisos partidistas con los grandes centros de poder. Al respecto, si hubo un objetivo que además se autoimpuso Chile durante los cuatros bienios al interior de este Consejo de Seguridad, fue ser aquella voz representativa de los pueblos terecermundistas. Bajo este contexto, la presente investigación buscó conocer y responder, a través de documentos diplomáticos y de prensa chilena, algunas interrogantes sobre el desarrollo de la política exterior chilena en lo que fue su actuación a través de su delegación apostada en el seno del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.