Historia de la cátedra de química fisiológica, fisiología general y fisiología especial de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valladolidperiodo 1917-1969

  1. Pérez-Accino García, Marta
Dirigida por:
  1. Ricardo Martín de la Guardia Codirector
  2. Alfonso Velasco Martín Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 22 de febrero de 2016

Tribunal:
  1. Ricardo Rigual Bonastre Presidente
  2. Guillermo A. Pérez Sánchez Secretario
  3. C. Treceño Lobato Vocal
  4. Enrique Echevarría Orella Vocal
  5. José Girón Garrote Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 411914 DIALNET

Resumen

La Facultad de Medicina de la Universidad de Valladolid fue recuperada en 1857 gracias a las gestiones de Don Claudio Moyano Ministro de Fomento y antiguo rector de la Universidad de Valladolid. Una de las Cátedras más importantes era la de Fisiología, cuya enseñanza a lo largo de gran parte del siglo XIX estaba ligada a la de Higiene Privada. La Cátedra de Fisiología en 1857 fue desempeñada por Don Hipólito Fernández Frutos (1957-1869) procedente de la Facultad de Medicina de Salamanca que fue suprimida a su vez en 1857 de la misma forma en que en 1845 fue suprimido en Valladolid el Colegio de Prácticas del Arte de Curar. A partir de 1869 ocuparon la Cátedra de Fisiología los siguientes profesores: Don Victoriano Díez Martín (1869-1877), Don José Moreno Fernández (1879-1880), Don Nicolás Homs y Pascuets (1880), Don José Armenter y Ferrer (1880-1881), Don Enrique Andrade Alau (1882- 1891), Don Luciano Clemente Guerra (1891-1916), Don Celestino Lorenzo Torremocha y Téllez (1917-1940) y Don Emilio Romo Aldama (1945-1969). A partir de 1928 se crea en Medicina la asignatura de Química Fisiológica y Fisiología General cuya docencia se agrega a la de Fisiología Especial. En la década de los setenta del siglo XX se produce un desdoblamiento. La Química Fisiológica pasa a denominarse Bioquímica y es impartida por un Profesor distinto del que imparte la Fisiología Especial que pasa a denominarse Fisiología Humana. Don Hipólito Fernández Frutos, Don Silvestre Cantalapiedra Hernández (Profesor Auxiliar) y Don Victoriano Díez Martín están más interesados en la Higiene Privada que en la Fisiología y sus lecciones inaugurales en la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid y en la Universidad Literaria de Valladolid versan sobre Higiene Privada, son piezas filosófica-literarias, sin título ni bibliografía ni soporte jurídico y normativo redactadas con el estilo grandilocuente de la época. El periodo comprendido entre 1879 y 1882 fue de gran inestabilidad académica para la asignatura de Fisiología, pues los Catedráticos de este periodo estuvieron de paso tratando de consolidar su situación administrativa y no realizaron labor alguna. Don Luciano Clemente y Guerra fue un hombre intelectualmente muy brillante, autor de magníficos manuales de la asignatura, pero estaba interesado en la Clínica y en la Fisiopatología y además tenía inquietudes políticas por lo que realizó muy escasa labor en el campo de la Fisiología Experimental. Don Celestino Lorenzo Torremocha y Téllez ocupó la Cátedra de Fisiología durante el período (1917-1940), introdujo la enseñanza práctica de la asignatura, se conserva su programa teórico y práctico, dotó a la Cátedra de más medios materiales, pronunció la Lección Inaugural del curso (1927-1928). En 1934 fue elegido Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valladolid, cargo que ocupó hasta su jubilación en 1940 vivió la descomposición política y académica de la IIª República (1931- 1936), la Guerra Civil (1936-1939), y el primer año de postguerra 1940, y formó parte de la Comisión Depuradora. Don Emilio Romo Aldama fue Profesor encargado de Cátedra durante el periodo (1940-1945) y Catedrático de Química Fisiológica General y Fisiología Especial durante el periodo comprendido entre (1945-1969). Era un hombre muy brillante desde el punto de vista intelectual, con gran facilidad de palabra y excelente docente, fue autor de un Manual de Química Fisiológica y un Manual de Prácticas de Química Fisiológica y Fisiología General y un Manual de Prácticas de Fisiología Especial de los tres manuales se hicieron varias ediciones. Don Emilio Romo Aldama dotó a la Cátedra de abundantes medios materiales (aparatos científicos reactivos, animales de laboratorios, revistas internacionales y abundantes libros y monografías), fue responsable de una Sección del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, publicó en revisas nacionales e internacionales que en una época posterior llegarían a tener factor de impacto, realizó dos estancias en el extranjero y formó numerosos discípulos entre los que destacan Don Juan Manuel de Gandarias y Bajón (Catedrático de Bioquímica y Fisiología de la Universidad de Salamanca en 1960 y a finales de la década de los setenta de las mismas asignaturas en la Universidad del País Vasco) y Don Benito Herreros Fernández (Catedrático de Bioquímica en la Universidad de Valladolid). Don Emilio Romo Aldama perteneció a una generación intermedia cuya labor permitió el despegue a nivel nacional e internacional de la Bioquímica y Fisiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valladolid en el último tercio del siglo XX y comienzo del siglo XXI. Todos los catedráticos de Fisiología del periodo comprendido entre (1857-1916), excepto los tres que estuvieron de paso, fueron nombrados Académicos de Número de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid, a pesar de sus escasísimas aportaciones al campo de la Fisiología Experimental. Para elaborar este trabajo se han revisado los expedientes y documentos de cada uno de los profesores estudiados procedentes del Archivo Histórico Universitario de Valladolid, Archivo General de la Administración de Alcalá de Henares, Biblioteca Reina Sofía de la Universidad de Valladolid, Fondo Histórico de la Biblioteca de la Facultad de Medicina y libros de Actas de las sesiones ordinarios y extraordinarios de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid depositadas en la Secretaria de esta corporación .