Tendencia del consumo de medicamentos con pictograma "medicamentos y conducción"estudio de registro basado en la población de Castilla y León
- Criado Espegel, Paloma
- Javier Álvarez González Director/a
- Eduardo Gutiérrez Abejón Codirector
Universidad de defensa: Universidad de Valladolid
Fecha de defensa: 20 de enero de 2022
- Javier Castrodeza Sanz Presidente
- Francisco Javier Ayesta Ayesta Secretario/a
- Rafael Aleixandre Benavent Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Introducción. Los accidentes de tráfico originan además de muertes, lesiones graves a las víctimas que producen, en muchos casos, incapacidad lo que supone un problema de salud pública con un alto coste social, sanitario y económico. Pese a la política desarrollada por la Unión Europea con la finalidad de reducir la siniestralidad del tráfico, en el año 2018 fallecieron más de 25.000 personas en Europa. En España, el porcentaje de personas fallecidas que han dado resultado toxicológico positivo a psicofármacos y drogas de abuso, ha ido aumentando a lo largo de la última década, siendo en 2019, las benzodiacepinas, antidepresivos y en menor medida, antiepilépticos y opioides los fármacos más comúnmente detectados. Desde el año 2011, los medicamentos comercializados en España y que afectan a la capacidad de conducir de forma segura (DIM), deben incluir en el embalaje externo el pictograma “Medicamentos y Conducción”. Este pictograma tiene como objetivo llamar la atención del paciente para que lea la información sobre la conducción de vehículos que aparece en el prospecto. Un paso más en la identificación de DIM, es la categorización de medicamentos realizada a través del proyecto europeo DRUID. Esta clasificación, categoriza los medicamentos en 4 niveles en función de cuanto afectan a la capacidad de conducir de manera segura. Tres de cada cuatro conductores que están bajo tratamiento farmacológico, afirma no haber sido informado de como puede afectar su medicación a la capacidad de conducción. En relación a ello, los profesionales sanitarios tienen la obligación de informar a los pacientes sobre el efecto de los medicamentos en la conducción con el fin de que sean conscientes del riesgo de sufrir un accidente de tráfico y, así reducir en lo posible dicho accidente. Justificación: Conocer la prevalencia de consumo de DIM, es el primer paso para poder establecer estrategias de intervención necesarias para reducir el riesgo de accidentalidad, además de que permiten valorar la efectividad de las medidas tomadas con anterioridad. Esta Tesis Doctoral forma parte de la línea de investigación que desarrolla el laboratorio de Macrodatos del área de Farmacología y Terapéutica de la Universidad de Valladolid en relación a los medicamentos y la conducción. Es por ello, que se han planteado tres análisis de diferentes subgrupos terapéuticos que hasta ahora no habían sido objeto de estudio: opioides, antidepresivos y antidiabéticos Hipótesis general: No se conocen las pautas de consumo ni la tendencia temporal de los DIM incluidos dentro de los subgrupos terapéuticos seleccionados, ni la proporción de la población general y conductora que los utiliza. Conocer esta información es fundamental para que el profesional sanitario, gestores y pacientes, conozcan la magnitud de este problema y puedan tomarse decisiones dirigidas a reducir el riesgo de accidente en los pacientes que estén en tratamiento con determinados medicamentos. Objetivos: Conocer en la población de Castilla y León las pautas de consumo de medicamentos que llevan incluido el pictograma “Medicamentos y Conducción” en el envase y que pertenecen a los subgrupos seleccionados (opioides, antidepresivos y antidiabéticos), con especial referencia a la duración del tratamiento y el uso concomitante de otros DIM para el período de tiempo comprendido entre 2015 y 2018. En este estudio se busca conocer el patrón de uso de estos medicamentos y conocer si existen diferencias o no en el caso de población general y de la población conductora. Metodología: Es un estudio de utilización de medicamentos retrospectivo basado en datos del mundo real a través de registros de población realizado en Castilla y León entre el año 2015 y 2018. El objetivo es conocer la evolución y las pautas de consumo de determinados subgrupos de medicamentos que llevan el pictograma “Medicamentos y Conducción” en el embalaje externo. La información se ha analizado en función de la edad, sexo, duración del tratamiento y el uso concomitante con otros DIM. Los subgrupos seleccionados han sido los opioides, antidepresivos y antidiabéticos según su clasificación ATC. La información sobre el pictograma se ha obtenido del listado publicado por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, cuya ultima actualización data del 18 de febrero de 2020. Los datos de consumo farmacéutico se han obtenido a través del Sistema de Información CONCYLIA, que es un sistema integrado de información y análisis de la prestación farmacéutica del Servicio Público de Salud de Castilla y León. La población objeto de estudio es aquella incluida en la base de datos de Tarjeta Sanitaria a mes de diciembre para cada año de estudio. El análisis del consumo en la población conductora se ha realizado a través de una estimación mediante el censo de conductores de Castilla y León facilitado por la Dirección General de Tráfico. Para la realización de los diferentes estudios se han obtenido registros de dispensación de los medicamentos seleccionados a nivel de paciente. Para la identificación de cada individuo se ha utilizado el código de identificación del paciente (CIP), el cual ha sido debidamente anonimizado para asegurar la protección de datos. Las variables primarias del análisis son las siguientes: 1) numero de envases, 2) número de Dosis Definidas Diarias (DDD) dispensadas y 3) población de Tarjeta Sanitaria. Por otra parte, las variables secundarias fueron las siguientes: categoría DRUID, consumo total de DIM, duración del tratamiento, uso diario, consumo concomitante con otros DIM, número y media de DIM diferentes consumidos. Para el análisis estadístico de los datos se ha utilizado el programa Statistical Package for the Social Sciences (SPSS 24.0. SPSS INC, Chicago, IL). Todos los contrastes de hipótesis se han realizado mediante técnicas paramétricas ya que la muestra cumple los criterios de normalidad de Kolmogorov-Smirnov y Shapiro-Wilk. Para la comparación entre dos grupos se ha utilizado el test T de Student en el caso de variables continuas, y para las variables categóricas se ha utilizado el test de Chi cuadrado de Pearson. Para medir la relación entre variable continuas independientes se ha utilizado el coeficiente de determinación R2. Por último, la prueba de tendencia de Cochran-Armitage se utilizó para evaluar la tendencia de consumo a lo largo del período de estudio. El nivel de significación estadística se ha establecido en p ≤ 0,05. Se han presentado los porcentajes con su intervalo de confianza al 95%, y las medias con su desviación estándar. Resultados: Los resultados obtenidos nos permiten conocer la magnitud del problema planteado, poniendo de manifiesto la necesidad de reforzar la información sobre el uso de medicamentos que afectan a la conducción en todos los ámbitos relacionados con la prescripción y dispensación de medicamentos, y además puede servir de ayuda para establecer nuevas estrategias de intervención a nivel de seguridad vial relacionada con el uso de medicamentos. Los resultados más relevantes se detallan a continuación - Los opioides afectan a la capacidad de conducir de forma segura, siendo su efecto mayor en el consumo agudo y en los cambio de dosis. En los últimos años ha aumentado considerablemente su uso, sobre todo en mujeres y ancianos. El 11,44% de la población general y el 8,72% de los conductores consumieron algún analgésico opioide. En el caso de los conductores, al contrario que en población general, los hombres usan más opioides que las mujeres. El uso concomitante con otros DIM es frecuente, lo que incrementa el riesgo de accidente. Los opioides en combinación son los más utilizados, concretamente los combos paracetamol-codeína y tramadol-paracetamol representan tres cuartas partes del consumo total. - El aumento del uso de opioides, junto con el riesgo potencial de abuso característico de estos fármacos hace necesario que, tanto profesionales sanitarios como gestores, desarrollen iniciativas para un uso seguro de los mismos, así como establecer medidas para que el paciente conozca los riesgos derivados de la utilización de los mismos. - El aumento de la prevalencia en el uso de antidepresivos en los años 2015 a 2019, es relevante y consistente con otros datos nacionales y europeos. Destaca el consumo en mujeres, tanto en población general como conductora, y además el uso aumenta con la edad. Los ISRS son los más consumidos. - El uso concomitante de antidepresivos con otros DIM, sobre todo con benzodiacepinas es frecuente, aumentando el riesgo de sufrir un accidente de tráfico. - El 4% de la población general y el 3% de conductores están en tratamiento con antidiabéticos orales solos o en combinación con insulina, siendo más frecuente el uso de antidiabéticos orales. Es más frecuente el uso de antidiabéticos en hombres que en mujeres. Sin embargo, el uso concomitante de antidiabéticos con otros DIM, es más frecuente en mujeres, y destaca el uso combinado con ansiolíticos y analgésicos. - El grado de control de las hipoglucemias, propias de la enfermedad o del uso de antidiabéticos, así como la educación sanitaria al paciente sobre los signos y síntomas de su enfermedad es clave para una conducción segura en los pacientes en tratamiento con antidiabéticos. Conclusiones: El uso de medicamentos que afectan a la conducción tanto en población general como en conductores es frecuente y aumenta con el tiempo. Es por tanto, un problema que debe ser estudiado por el impacto sanitario, social y económico que tienen los accidentes de tráfico Es una información de interés tanto para los gestores sanitarios como para los profesionales de la salud, los pacientes y los gestores encargados de establecer políticas en materia de seguridad vial, ya que su conocimiento puede servir para establecer políticas dirigidas a disminuir el impacto del consumo de fármacos que afectan a la conducción, a realizar una prescripción más adecuada en torno a las necesidades y situación personal de cada paciente, a realizar una dispensación informada y segura, y a que el paciente asuma la responsabilidad que tiene respecto a su tratamiento y a la seguridad vial. Artículos publicados. La Tesis se ha realizado por compendio de publicaciones: - Herrera-Gómez F, Gutierrez-Abejón E, Ayestarán I, Criado-Espegel P, Álvarez FJ. The Trends in Opioid Use in Castile and Leon, Spain: A Population-Based Registry Analysis of Dispensations in 2015 to 2018. J Clin Med. 2019 Dec 5;8(12):2148. doi: 10.3390/jcm8122148. - Gutiérrez-Abejón E, Herrera-Gómez F, Criado-Espegel P, Álvarez FJ. Trends in Antidepressants Use in Spain between 2015 and 2018: Analyses from a Population-Based Registry Study with Reference to Driving. Pharmaceuticals (Basel). 2020 Apr 3;13(4):61. doi: 10.3390/ph13040061. - Gutiérrez-Abejón E, Criado-Espegel P, Herrera-Gómez F, Álvarez FJ. Population-Based Registry Analysis of Antidiabetics Dispensations: Trend Use in Spain between 2015 and 2018 with Reference to Driving. Pharmaceuticals (Basel). 2020 Jul 25;13(8):165. doi: 10.3390/ph13080