Crisis ecológica y de civilización

Resumen

Se oye hablar continuamente de las crisis de diverso tipo que nos asolan y sólo en un segundo plano emerge lo que tiene que ver con esas cosas de la ecología y el medio ambiente. A casi todo el mundo le suena la música pero bastante menos la letra, y tales asuntos son tomados como algo más bien difuso si se compara con la economía o el terrorismo, pongamos por caso. Frente a los muy repetidos mantras políticos y mediáticos sobre el empleo, la deuda o las amenazas a la seguridad, no resulta para la mayoría algo urgente ni cercano, como tampoco lo es la tragedia migratoria ni cualquier otra cosa que no le afecte de lleno en el día a día. Todo eso interesa, sí, pero de forma relativa y además, parece decirse, la gente tiene problemas mucho más acuciantes, preocupaciones inmediatas, mucha prisa y bastante cansancio, e incluso cierto hartazgo ante tantas alarmas y obligaciones. Hay demasiado ruido y precariedad en la vida –sería la explicación definitiva– como para escuchar atentamente aquel mensaje antipático que no cabe en el whatsapp… Los teléfonos inteligentes están para otra cosa, claro, y uno no quiere hacerse un selfie con las penurias. Aún así, para quienes desean ordenar las ideas y saber hasta qué punto llega la cosa, sobre todo para las generaciones que vienen detrás, aquí va una breve síntesis.