Profesionalización en gobiernos subnacionales de México como estrategia para garantizar la buena administración pública

Resumen

Las administraciones públicas han demostrado una incapacidad para resolver y atender adecuadamente los diversos problemas sociales. Esta incapacidad es reflejo de un mal diseño institucional y la falta de un marco normativo actualizado al mundo contemporáneo y sus desafíos, presentes en un mundo globalizado e influenciado por innovaciones tecnológicas y científicas, entre otros factores. Asimismo, representa un reto atender fenómenos como la migración, la crisis económica, la inseguridad y la salud. Por otro lado, en algunos casos, la debilidad radica en no contar con un “núcleo estratégico” de funcionarios y servidores públicos con las capacidades y aptitudes necesarias para innovar y realizar las funciones y gestiones que demandan las sociedades; es decir, un cuerpo de servidores profesionalizados para dotar de servicios públicos con una calidad óptima. Para afrontar los retos en estas administraciones,se han diseñado diversos modelos de gestión para gobernar, que van desde el modelo de burocracia clásico weberiano, la nueva gestión pública, la post-nueva gestión pública, la gobernanza, el gobierno abierto y el gobierno electrónico (e-government), entre otros. Sin embargo, para todas estas opciones, es indispensable contar con “servidores públicos profesionalizados”. Por un lado, esto implica contratar a los más capaces, que demuestren, basándose en el mérito, contar con las aptitudes y capacidades suficientes para cubrir el perfil requerido por el puesto que desempeñarán en la función pública. Por otro lado, es importante que los gobiernos diseñen y se preocupen por mantener a sus servidores públicos debidamente capacitados con programas permanentes de profesionalización y actualización. En ese sentido, las recomendaciones realizadas por organizaciones internacionales, así como diversos estudios con rigidez académica y científica, han demostrado que la implementación de modelos meritocráticos para administrar los recursos humanos en las administraciones facilita las condiciones y, por ende, mejora los resultados en la gestión pública, así como la confianza de los servidores públicos y de la ciudadanía en los gobiernos y sus instituciones. Esto se logra al democratizar y transparentar los procesos de reclutamiento, selección, ingreso, permanencia, capacitación, ascenso o desarrollo y, en su caso, separación del cargo por motivos de ineficiencia. Diversos estudios empíricos han demostrado que los Servicios Civiles de Carrera (SCC) que funcionan bien contribuyen al crecimiento económico, a una mejor prestación de servicios y a la administración pública (Johnson, 1982; Wade, 1990; Meyer-Sahling y otros, 2018). Asimismo, ayudan a aumentar la confianza de los ciudadanos en las instituciones del Estado, evitar la reproducción del sistema de botín y combatir la corrupción. En este sentido, por ejemplo, el Banco Mundial reconoce que la burocracia jugó un papel clave en el desarrollo económico de países asiáticos en la segunda mitad del siglo XX, mostrando una mayor eficiencia y eficacia en términos de indicadores de gobernabilidad, con el objetivo de fortalecer la lucha contra la corrupción (Birdsall y otros, 1993). Los SCC son un sistema meritocrático que administra los recursos humanos en las administraciones de cualquiera de los tres órdenes de gobierno (federal, estatal y municipal). Por ello, y ante la preocupación de que, en México, a pesar de contar con una Ley del Servicio Profesional de Carrera de la Administración Pública Federal desde el año 2003, es decir, dos décadas desde su promulgación e implementación en los gobiernos subnacionales (entidades federativas y municipios) parece ser letra muerta y todavía es una asignatura pendiente de la modernización de las administraciones en la república mexicana. Ante ello, nuestro interés es investigar qué es lo que esta sucediendo en materia de profesionalización de los gobiernos subnacionales en México, enfocándonos principalmente en los gobiernos municipales, ya que a nuestro parecer es el eslabón más débil dentro de los tres órdenes de gobierno, y quienes tienen bajo su responsabilidad la satisfacción de los servicios públicos más apremiantes para la convivencia social en la república mexicana.