La comunicación del poder ejecutivo en Puerto Rico (1972-2019)

Laburpena

La estructura de comunicación de un gobierno es vital para transmitir información sobre política pública de forma efectiva. Esta tesis centra su atención en el desarrollo de la estructura de comunicación del poder ejecutivo del gobierno de Puerto Rico, en un espacio de 47 años (1972- 2019), que incluye nueve periodos de gobernación y ocho gobernantes diferentes. Investigamos cómo los gobernantes organizaron su estructura de comunicación para enfrentar los desafíos de la gobernanza y fortalecer la proyección de su imagen. Nuestro análisis identificó que los gobernantes intentaron centralizar y controlar la comunicación a través de cambios en la estructura y en el modelo de portavocía. Estos cambios aumentaron el alcance estratégico de la estructura, pero también afectaron negativamente la funcionalidad del sistema de comunicación. Aplicamos la teoría general de los sistemas de Bertalanffy (1986) a la estructura de comunicación gubernamental para comprender la interacción, representatividad y funcionalidad de las partes en ese sistema. Guiados por el modelo de Sanders y Canel (2013) para el análisis de la estructura de comunicación de un gobierno, proponemos cuatro categorías para analizar la estructura de comunicación del poder ejecutivo del gobierno de Puerto Rico: Estructura, Portavocía, Comunicación estratégica y Transparencia. Los ocho cambios de administración gubernamental y constantes alteraciones de esta estructura entre los años 1972-2019 hicieron necesario aplicar diferentes perspectivas teóricas para establecer contrastes y ampliar el análisis: Elizalde (2006), Canel (2007), Sullivan (2001), Kumar (2007) y Deutsch (1980). Concluimos que el poder ejecutivo en Puerto Rico cuenta con una estructura de comunicación planificada, dividida en unidades fundamentales para gestionar la comunicación, que incluyen la secretaría de la gobernación, la secretaría de asuntos públicos, la secretaría de prensa y la oficina de comunicaciones. Esta última, a su vez, contiene subestructuras de monitoreo, investigación, eventos, redacción de discursos, comunicación visual y digital. Hubo esfuerzos de parte de algunas administraciones por profesionalizar la estructura, por ejemplo, con el establecimiento de una oficina central de comunicaciones, una unidad de política pública y un sistema de medios digitales. Sin embargo, encontramos varios factores que afectaron la estabilidad de la estructura, como la carencia de una unidad de manejo de crisis, la politización de la estructura, la burocracia y la incongruencia entre el mensaje y la ejecución; todo ello dio lugar a la improvisación y dejó al descubierto las deficiencias en el sistema. A estos factores se añade la imposición de una Junta de Supervisión Fiscal de parte de los Estados Unidos que supeditó la comunicación del gobierno puertorriqueño desde 2016. Finalmente, varios de estos factores convergieron para provocar el colapso total del gobierno de Ricardo Rosselló en 2019.